viernes, 1 de marzo de 2024

He visto temblar tus manos

He visto temblar tus manos y en tu resplandor brilla como el sol del mundo que hay en su interior, no hay soledad, solo tú y yo. En un mundo que sigue sin saber que hacer, solo tú y yo. En un tiempo que no quiero conocer, solo tú y yo, solos tú y yo, solos tú y yo. Dime amor que es lo que podemos hacer, si no hay nadie más, que nos falta para podernos querer, si no hay nada más. Háblame del tiempo que puede venir, de la vida entera que quieres vivir, de todo lo que ahora se habla por ti y de que tus labios suspiran por mí. Háblame del tiempo y de la libertad, de que nuestra vida podrá ser capaz de hacer que todo renazca por ti y de que tus labios suspiran por mí. Háblame, háblame de ti. Háblame, háblame de ti. Que no haya nadie a quien seguir, que al fin podamos sonreír.

He visto temblar tus manos

He visto temblar tus manos y en tu resplandor brilla como el sol del mundo que hay en su interior, no hay soledad, solo tú y yo. En un mundo que sigue sin saber que hacer, solo tú y yo. En un tiempo que no quiero conocer, solo tú y yo, solos tú y yo, solos tú y yo. Dime amor que es lo que podemos hacer, si no hay nadie más, que nos falta para podernos querer, si no hay nada más. Háblame del tiempo que puede venir, de la vida entera que quieres vivir, de todo lo que ahora se habla por ti y de que tus labios suspiran por mí. Háblame del tiempo y de la libertad, de que nuestra vida podrá ser capaz de hacer que todo renazca por ti y de que tus labios suspiran por mí. Háblame, háblame de ti. Háblame, háblame de ti. Que no haya nadie a quien seguir, que al fin podamos sonreír.